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El mandatario Abdo Benítez llegó en compañía de la primera dama, Silvana López Moreira, del canciller nacional, Luis Castiglioni, y del embajador paraguayo en Costa Rica José Félix Fernández Estigarribia, para participar de la audiencia de la Corte IDH, por el caso Arrom-Martí.

La defensa paraguaya está integrada por el procurador general Sergio Coscia, el fiscal adjunto de la Unidad de Derechos Humanos del Ministerio Público, Ricardo Merlo, y por el director de DD.HH de la Cancillería, Marcelo Scappini.

Asimismo, participan los declarantes propuestos por el Estado: Oscar Germán Latorre ex Fiscal General del Estado, y el fiscal Edgar Sánchez.

La delegación presente en la audiencia está compuesta además por la directora de DD.HH de la Cancillería, María Noelia López, los procuradores delegados Renzo Cristaldo, Pablo Rojas, Belén Diana, la directora de DD.HH del Ministerio Público, Alejandra Peralta y funcionarios del Ministerio del Interior y del Ministerio Público.

La Corte está presidido por Eduardo Ferrer Mac-Gregor, su vicepresidente es Eduardo Vio Grossi y el secretario es Pablo Saavedra Alesssandri.

Juan Arrom y Anuncio Martí demandan al Estado paraguayo por presuntos secuestro y tortura, en enero de 2002, en donde policías buscaban que admitan su responsabilidad en el secuestro de María Edith Bordón, ocurrido meses antes. La indemnización solicitada por ambos asciende a unos 63 millones de dólares. El presidente Abdo Benítez ratificó que el Estado paraguayo no “pagará un solo guaraní”.

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