2022-04-01 | 10:20
Fútbol internacionalHaland se aleja del Real
Durante las últimas semanas Mino Raiola ha activado la subasta final redoblando sus desmesuradas exigencias, y este es precisamente uno de los grandes obstáculos que en el club blanco ven a la operación: el propio Raiola. Además del estratosférico salario que pide para su jugador (30 millones netos), algunas de las condiciones relativas a las primas de fichaje y las formas de pago que plantea el peculiar representante italiano se consideran inadmisibles por los dirigentes del Real Madrid. Por si fuera poco, también hay dudas más que razonables sobre el estado físico del delantero, puesto que haber sufrido 14 lesiones con sólo 21 años (tres esta temporada) es una tarjeta de presentación que invita a la desconfianza. Esa prevención es perfectamente comprensible a la vista del historial de lesiones de las dos estrellas que estaban llamadas a tomar el relevo de Cristiano Ronaldo: Bale y Hazard. En el club blanco saben que no pueden permitirse un tercer fichaje estelar fallido por este motivo.
La última palabra
Por todo ello, pero también porque jugar en la Premier para Guardiola representa un aliciente tan grande como el de formar parte de la leyenda del Real Madrid, y porque integrar una delantera de ensueño junto a Mbappé tiene tantos argumentos a favor como en contra pensando en el protagonismo del noruego, Haaland se lo está pensando mucho. En Valdebebas creen que si la última palabra en la decisión final corresponde al jugador, sus posibilidades aumentarán, pero si Raiola persuade al padre del futbolista con sus argumentos, principalmente económicos, posiblemente acabará recalando en el City.
Por su parte, en el club de Manchester tampoco las tienen todas consigo en estas últimas semanas, aunque la interlocución directa de Guardiola con Haaland para convencerle de que es el delantero que necesita para redondear su equipo parecieron desnivelar la balanza. Además de eso y de pagarle un altísimo salario, el City se mostró dispuesto a aceptar incluir en el contrato una cláusula de salida por una cantidad asequible, al estilo de la que le impuso al Dortmund en su día por 75 millones, para que el futbolista pudiera cumplir en el futuro su deseo de jugar en España.
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