Imagen ilustrativa. GENTILEZA

Este martes en la tarde (hora local), se empezaron a difundir fotos y videos por medio de redes sociales donde se veían grandes columnas de humo en la península de Crimea, la cual fue anexada a Rusia en 2014. El Ministerio de Defensa de Rusia informó que se trató de una serie de detenciones accidentales de municiones almacenadas en un aeródromo. 

"En el territorio del aeródromo Saki, en las cercanías de la localidad de Novofiódorofka, tuvo lugar la detonación de varias municiones en un área de almacenamiento protegida", señaló el Ministerio mediante un comunicado. 

Según informes del ministro de Salud Pública de Crimea, Konstantín Skorupski, "al hospital regional fueron trasladados cinco heridos, uno de ellos menor de edad". Más adelante la misma entidad informó que el número de heridos se elevó a seis y se reportó el deceso de un civil. 

El gobernador ruso de Crimea, Serguéi Aksiónov, se desplazó al lugar donde se registraron alrededor de 12 explosiones y señaló que tomaron todas las medidas necesarias en una zona de 5 kilómetros a la redonda para proteger la seguridad de la población y la infraestructura. 

Desde que inició la guerra en Ucrania el 24 de febrero, Rusia ha informado sobre numerosos incendios y explosiones en sitios de almacenamientos de municiones en su territorio, cerca de la frontera con Ucrania. 

El Ministerio de Defensa del Kremlin aseguró que ni las instalaciones del aeródromo, ni el equipamiento aéreo, resultaron afectados tras las explosiones de las municiones. 

Las explosiones podrían ser utilizadas como excusa por Rusia como para atacar a Ucrania 

En los videos publicados mediante redes sociales, se veían bañistas horrorizados huyendo de las explosiones. Las detonaciones sucedieron muy cerca de balnearios en la península de Crimea, un lugar donde muchos rusos acostumbran a pasar sus vacaciones durante el verano.

Inicialmente, por las redes sociales ucranianas se difundió el rumor de que las detonaciones en Crimea habían sido un ataque de largo alcance ordenado desde Kiev, aumentando el miedo de un nuevo ataque a Ucrania por supuestamente haber cruzado la línea roja de atacar un territorio controlado por Rusia. 

Previamente, el 31 de julio, un funcionario de Crimea había acusado a Ucrania de estar detrás de un ataque con drones en Sebastopol, donde cinco personas resultaron heridas. 

Rusia se anexó este territorio que pertenecía a Ucrania en 2014, y en febrero de este año lo utilizó como una plataforma de lanzamiento para invadir a su país vecino. 

La parcialmente reconocida república de Crimea se ha librado de los intensos bombardeos y combates de artillería que han sufrido otras zonas al este y sur de Ucrania desde que las fuerzas rusas iniciaron su invasión.

El Gobierno ucraniano se pronunció mediante su Ministerio de Defensa frente a los hechos diciendo que no podían determinar la causa de las explosiones e hizo un llamado de atención para cumplir las normas de seguridad contra los incendios y la prohibición de fumar en lugares no certificados. 

La base militar donde sucedió el accidente, se encuentra ubicada a unos 50 kilómetros al norte del puerto de Sebastopol, sede de la Flota del Mar Negro de Rusia, la cual Moscú rentó a Kiev durante décadas antes de tomarse el lugar y anexar toda la península a su nación.  

Durante las últimas semanas, las tropas ucranianas han estado organizando contraataques en las áreas ocupadas por Rusia, mientras intentan contener las fuerzas de su enemigo en la región industrial del Donbass. 

Este martes, el Departamento de Estado de Estados Unidos aprobó una ayuda de 89 millones de dólares para ayudar a Ucrania a equipar y entrenar equipos para limpiar minas terrestres y artefactos explosivos sin detonar. 

El anuncio se produce tan solo un día después de que el Gobierno estadounidense anunciara una ayuda de mil millones de dólares en armas para Ucrania.

Sin embargo, la ONU ha dicho que se necesitan alrededor de 4.300 millones de dólares de ayuda humanitaria para los ucranianos, cifra que podría aumentar con la llegada del invierno. 

Por su parte, el Departamento de Defensa de Estados Unidos estimó mediante su inteligencia que, entre 70 y 80 mil soldados rusos, han muerto desde que inició la guerra hace 5 meses.  France24