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En horas de la madrugada de este lunes, la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas ejecutaron una incursión en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú con el objetivo de recuperar el control pleno de la principal cárcel de Paraguay, parcialmente controlada por el grupo criminal “clan Rotela”, y extraer al líder de esa organización, Armando Javier Rotela, quien cumple allí una condena de 27 años.

Alrededor de 1.500 agentes de la Policía Nacional y 1.000 efectivos de las Fuerzas Armadas participan del operativo.

Se registraron enfrentamientos entre los interventores y las personas privadas de su libertad en el penal, además de una humareda, producto de un aparente incendio dentro de las instalaciones de la prisión. Imagenes tomadas por ABC TV mostraban a internos sobre el techo de la penitenciaría.

Al menos un agente de la Policía Nacional resultó herido y fue retirado en ambulancia. Por el momento no hay información sobre heridos entre los internos.

“Recuperar el control total”
En un breve comunicado, el Ministerio de Justicia describió la intervención como un intento de “recuperación integral del control institucional” de Tacumbú, algunos sectores de la cual están bajo control del clan Rotela.

El coronel Víctor Urdapilleta, vocero de las Fuerzas Militares, enfatizó que el objetivo del operativo es “recuperar el control total de la penitenciaría, que la seguridad esté a cargo del Estado y la administración se realice como corresponde”.

Dijo que se garantizará la seguridad de todos los internos que cooperen con las fuerzas del orden.

Por su parte, Rodrigo Nicora, viceministro de Política Criminal del Ministerio de Justicia, dijo que existe un plan para trasladar a entre 600 y 700 internos de Tacumbú a otras penitenciarías para “redistribuir a personas o poblaciones que de alguna manera ejercen control dentro del penal”.

abc